La impresión 3D revoluciona la fabricación de piezas para vehículos de drift
En el mundo del drift profesional, donde los impactos son frecuentes, la impresión 3D se ha convertido en una herramienta indispensable para los equipos. Esta tecnología permite crear piezas aerodinámicas externas y componentes internos de forma rápida y económica, facilitando el reemplazo inmediato de elementos dañados durante las competencias. Los ingenieros pueden diseñar y producir en horas lo que antes tomaba días, manteniendo los coches en óptimas condiciones sin incurrir en costos elevados.
Aplicaciones en componentes externos
Los equipos utilizan impresoras 3D para fabricar paneles frontales, rejillas y alerones que mejoran la aerodinámica y resisten los golpes. Estos elementos, al ser producidos con materiales ligeros y duraderos, ofrecen un equilibrio perfecto entre rendimiento y protección. Además, al poder imprimirse bajo demanda, se reduce el tiempo de inactividad del vehículo, lo que es crucial en un deporte donde cada segundo cuenta.
Ventajas en sistemas internos
Dentro del chasis, la impresión 3D se emplea para crear soportes personalizados que organizan el cableado y los sistemas de refrigeración. Estos soportes aseguran que los componentes críticos permanezcan en su lugar incluso durante derrapes extremos, previniendo fallos técnicos. La capacidad de adaptar cada pieza a las necesidades específicas del coche mejora la eficiencia general y simplifica el mantenimiento.
A veces parece que los pilotos disfrutan más chocando que derrapando, pero al menos ahora pueden estrellarse con estilo y sin arruinarse.