Esqueleto con heridas graves del duque asesinado en 1272
Los investigadores forenses han confirmado que los restos óseos recientemente descubiertos presentan signos de violencia extrema y coinciden con los del duque asesinado en 1272. Este hallazgo proporciona nueva información sobre las circunstancias de su muerte, permitiendo reconstruir aspectos de los métodos de ataque y el contexto histórico de la época. Los análisis detallados revelan múltiples fracturas y heridas de arma blanca, lo que sugiere un enfrentamiento violento o un ataque premeditado.
Análisis forense de las heridas
El equipo forense ha identificado múltiples fracturas en el cráneo y las costillas, junto con marcas de cortes profundos en los huesos, que indican el uso de armas como espadas o hachas. Estas heridas son consistentes con relatos históricos que describen la muerte del duque durante un conflicto político. La gravedad de las lesiones sugiere que el ataque fue brutal y probablemente ejecutado por varios agresores, lo que refuerza la teoría de una conspiración en la corte medieval.
Contexto histórico y reconstrucción
Este descubrimiento arroja luz sobre los turbulentos eventos políticos de la época, donde las luchas por el poder a menudo terminaban en violencia extrema. Los investigadores utilizan esta evidencia para reconstruir no solo el método del ataque, sino también las tensiones sociales y dinásticas que caracterizaron el siglo XIII. La identificación del esqueleto permite a los historiadores revisar y ajustar las narrativas existentes, ofreciendo una visión más precisa de cómo se desarrollaban estos conflictos en la vida real.
Parece que incluso en la Edad Media, tener un título nobiliario no garantizaba una jubilación tranquila, sino más bien una despedida bastante cortante.