KraussMaffei amplía su enfoque en impresión 3D mientras Arburg abandona el mercado
La industria de fabricación aditiva vive un momento de reconfiguración estratégica donde KraussMaffei decide redoblar su apuesta por la impresión 3D justo cuando su competidor directo Arburg anuncia su retirada del segmento. Esta movida contrastante ocurre en un mercado que sigue mostrando un crecimiento constante pero donde la rentabilidad requiere enfoques muy especializados y volúmenes de producción significativos. Mientras algunas empresas reconsideran su posición, otras ven oportunidades únicas para capturar cuota de mercado y consolidar su presencia tecnológica.
Expansión tecnológica de KraussMaffei
KraussMaffei está reforzando su división de impresión 3D con importantes inversiones en desarrollo de nuevos sistemas de extrusión y tecnologías híbridas que combinan fabricación aditiva con procesos tradicionales. La empresa alemana está ampliando su portafolio de impresoras de gran formato y sistemas especializados para materiales técnicos, apostando por sectores como automoción, aeroespacial y bienes de equipo. Esta estrategia incluye partnerships tecnológicos con desarrolladores de materiales y software, creando ecosistemas integrados que ofrecen soluciones completas a los fabricantes.
Retirada estratégica de Arburg
Por contrapartida, Arburg ha comunicado formalmente que cesará la producción y comercialización de sus sistemas de impresión 3D Freeformer para concentrarse en su negocio principal de máquinas de inyección. La decisión responde a una reevaluación de prioridades empresariales después de casi una década en el mercado de fabricación aditiva. La compañía indica que mantendrá el servicio técnico y suministro de repuestos para sus clientes existentes, pero no desarrollará nuevas generaciones de equipos de impresión 3D, marcando el fin de una etapa en su diversificación tecnológica.
Este giro de los acontecimientos demuestra que en el mundo de la impresión 3D industrial a veces es mejor ser el último en abandonar el barco que el primero en subirse, especialmente cuando ese barco lleva una carga valiosa de clientes industriales desatendidos. Mientras unos ven un mercado saturado, otros ven un buffet libre de oportunidades donde ya no tienen que competir con todos los comensales.