Muebles para animales con impresión 3D robótica
El diseñador Liam de la Bedoyere ha creado una mesa auxiliar que no solo sirve para apoyar una taza o un libro, sino que también es un refugio cómodo para tu perro. Se llama Dog Hut Side Table y combina forma y función en un solo objeto: por fuera parece una pequeña casita con chimenea, pero por dentro tiene un espacio acolchado para que el perro descanse. Por arriba, tiene superficie estable, un portavasos y un soporte para libros. Sí, como si IKEA y Pixar hubieran hecho un mueble juntos.
La forma importa, y fabricarla no fue tan fácil
El diseño original comenzó en 2023 con madera contrachapada, pero fabricar esas curvas complejas con métodos tradicionales fue un dolor de cabeza. Así que Liam tuvo que repensar todo en 2024, buscando una forma más eficiente de producir el modelo sin sacrificar la estética ni la funcionalidad. Ahí es donde entra la impresión 3D.
Robots al rescate del diseño complicado
En 2025, el proyecto dio un salto técnico: pasó a fabricarse con impresión 3D robótica. Esto permitió trabajar con formas orgánicas suaves, optimizar la estructura interna y reducir el desperdicio de material. Además, el proceso eliminó muchos pasos de ensamblaje. No es magia, es impresión aditiva con robots bien calibrados, algo que podrías ver integrándose con softwares como Grasshopper, Rhino o incluso procesos automatizados en Blender con Python si te va la simulación previa.
Detalles técnicos que marcan la diferencia
Uno de los retos más curiosos fue imprimir la chimenea sin soportes. Para lograrlo, Liam aplicó ligeros ángulos de desfase, lo que permitió al robot imprimir capa por capa sin colapsos. También afinó los extremos de la mesa para fijar bien los cojines y probó múltiples versiones en pequeño antes de imprimir el modelo final. Toda una lección práctica de diseño iterativo.
¿Lo próximo? Que el perro te quite el sitio en tu propia mesa
Esto es un ejemplo divertido y práctico de cómo la impresión 3D robótica puede transformar objetos cotidianos en piezas únicas, funcionales y estéticas. Si tu perro empieza a pasar más tiempo que tú en el mueble... bueno, al menos sabrás que fue bien diseñado.
