Un cementerio nuclear a 650 km de Galicia
Frente a las costas de Galicia, en pleno Atlántico y a más de 3.000 metros de profundidad, yace un problema bastante incómodo, más de 200.000 barriles con residuos nucleares que llevan décadas ahí abajo. Estos bidones fueron arrojados entre 1946 y 1990, en una época en la que la gestión de residuos nucleares era… digamos… menos delicada que ahora.
La misión NODSSUM está buscando lo invisible
Para localizar estos barriles, el buque oceanográfico francés L’Atalante ha iniciado una misión que parece sacada de un proyecto de simulación en Blender o incluso de una escena submarina hecha en Houdini. En sus primeros días de trabajo, ya han logrado localizar 1.000 de estos bidones. Una cifra pequeña si pensamos que buscan más de 200.000. El proyecto, bautizado como NODSSUM-I, durará aproximadamente un mes.
Tecnología de exploración a lo James Cameron
El equipo utiliza un submarino autónomo de 4,5 metros llamado Uly X, equipado con cámaras y sensores que permiten cartografiar el fondo marino y tomar fotografías de los barriles. Todo esto recuerda bastante a una mezcla de trabajo de modelado 3D y VFX, pero aquí el render es en tiempo real… y bajo 5.000 metros de agua. Para la siguiente fase, NODSSUM-II, tienen previsto usar ROVs como el Victor o incluso el minisubmarino Nautile, que parece sacado de un DLC de Subnautica.
Barriles encapsulados y radiactividad a la baja (o eso dicen)
Los bidones contienen residuos de baja y media actividad, lodos, metales contaminados y hasta restos de oficinas. La American Nuclear Society asegura que muchos de estos materiales fueron encapsulados en cemento o bitumen para soportar la presión. A día de hoy, buena parte de la radioactividad ya debería haber disminuido… aunque claro, siguen existiendo isótopos de larga vida que podrían seguir activos. Como quien dice: el shader de la radioactividad no tiene keyframes de apagado tan rápidos.
Evaluar el impacto: ¿contaminación silenciosa?
Además de localizar los bidones, el equipo está recogiendo muestras de agua, sedimentos y vida marina. El objetivo es estudiar si los ecosistemas locales están mostrando trazas de isótopos radiactivos. También quieren entender cómo se transportan estos elementos por las corrientes y los sedimentos, en una especie de simulación de partículas… pero en versión oceánica y sin botón de undo.
Un render lento y lleno de incógnitas
La búsqueda de estos barriles apenas ha comenzado. Si esto fuera una animación, estamos todavía en el blocking. Queda mucho por descubrir y bastante por limpiar… si algún día deciden hacerlo. Mientras tanto, los barriles siguen allí abajo, como props olvidados en el viewport de la historia nuclear europea.
:sad: