Horror retro con humor y salto de pantalla
A veces ver películas de miedo da más risa que susto, sobre todo si uno empieza a comentar en voz alta todos los errores de guion, los gritos innecesarios y la lógica ausente. Eso le pasa a Andrew, un espectador que no puede estarse callado mientras ve un slasher ochentero con más clichés que texturas planas en un render sin bakear.
Un salto al otro lado del monitor
Mientras Andrew lanza críticas como si estuviera streameando en directo, el villano del film un asesino con garras y poca paciencia decide que ya fue suficiente. En vez de resetear el router, cruza literalmente la pantalla y lo arrastra al interior de la película. Así, el fanático se convierte en personaje, pero no en plan cameo simpático, ya que ahora tiene que terminar el trabajo del asesino o, básicamente, morir intentándolo.
La lógica del cine al revés
Una vez dentro, Andrew cree que todo será fácil. Total, se sabe todos los trucos de este tipo de películas. Pero no es lo mismo mirar desde el sofá que correr entre árboles de cartón pluma con la cámara persiguiéndote. Cada decisión que toma tiene consecuencias y el guion ya no se puede pausar ni rebobinar. Aprender a sobrevivir en un entorno digital con normas de terror vintage se convierte en su nueva tarea, muy por encima del render en cola.
Diseño entre susto y risa
El corto se llama Claw y fue desarrollado por un equipo de estudiantes de ESMA como proyecto final. La idea recuerda a Last Action Hero, pero en lugar de héroes musculosos hay cinéfilos atrapados y asesinos autoparódicos. El equilibrio entre humor y miedo se convierte en un recurso de estilo, que les permite explorar animaciones caricaturescas con iluminación de película de serie B y efectos que oscilan entre el susto y la carcajada.
De la crítica a la víctima en cuatro clics
Para los interesados en la producción, el equipo responsable está formado por nueve personas que se repartieron dirección, arte, composición y animación, con música y diseño de sonido integrados desde el concepto. No es una producción comercial, pero se siente como una clase intensiva de cómo darle la vuelta al cliché sin romper la cuarta pared (o sí, literalmente).
Detalles para quienes quieran buscar el cortometraje:
- Título: Claw
- Escuela: ESMA
- Dirección: Lucas Ferrer, Ayoub Chaibi, Marianne Dautheville, Chloe Ferrus, Thomas Petroni, Melissa Saba, Dylan Sayagh, Alizée Valenzuela, Florian Wagner
- Música: David Robson
- Sonido: Guilhem Favard, Tristan Lebozec, Jose Vicente
- Voces: Roberto Joliffe, Mark Kaczmarek, Victoria Mackay
Más allá del fan service
Este corto no busca revolucionar el terror, sino rediseñar sus elementos clásicos para que convivan con la comedia sin perder identidad. Y eso, en términos de diseño gráfico, es como balancear luces volumétricas con expresiones faciales en low poly, es complejo pero posible. La escena del espectador absorbido por la ficción sirve como excusa para reflexionar, entre broma y broma, sobre cómo consumimos medios y qué pasa cuando las pantallas responden.