Qué necesitas saber sobre la animación y el rigging
Si quieres dedicarte a la animación 3D, no es estrictamente obligatorio que seas un experto en rigging, pero sí es muy recomendable que tengas conocimientos básicos. Entender cómo funciona un rig te permitirá anticiparte a problemas, planificar mejor las poses y aprovechar al máximo las herramientas que te da el rig. Saber riggear desde cero no siempre será tu trabajo, pero comprender jerarquías, constraints, controllers y cómo se mueven los huesos te da una ventaja enorme como animador.
Cómo abordar el aprendizaje
Lo ideal es empezar con tutoriales que expliquen rigging básico y luego moverse a rigging intermedio. Por ejemplo, aprender a colocar huesos, usar Inverse Kinematics (IK), controlar expresiones faciales, constraints y controladores de movimiento. En paralelo, estudia animación: timing, poses clave, anticipación, follow-through y squash & stretch. Plataformas como YouTube, CGCookie, Udemy o Pluralsight tienen cursos específicos tanto de rigging como de animación. También hay DVDs o manuales clásicos de animación 3D como los de Richard Williams o Preston Blair adaptados a 3D que explican principios universales de animación.
No te obsesiones con crear rigs complejos desde cero al inicio. Aprende primero a animar con rigs existentes, analiza cómo están construidos y luego empieza a modificar y crear rigs sencillos. Es como aprender a conducir antes de construir un coche: primero manejas, luego entiendes la mecánica. Comprender cómo funcionan te permitirá tener mayor libertad y evitar frustraciones cuando el rig tenga limitaciones.