Soluciones para cuando los cuerpos rígidos se comportan de forma extraña en Maya

Cuando los objetos rígidos deciden rebelarse en Maya
En el maravilloso mundo de las simulaciones físicas, existe un momento mágico cuando los objetos con exactamente los mismos parámetros deciden comportarse como niños malcriados: uno rebota, otro atraviesa paredes como fantasmita y el tercero se queda pegado como chicle en el pelo 🍬. Y no, no es que Maya haya tomado ayahuasca, hay razones lógicas (aunque frustrantes) detrás.
Los culpables invisibles del caos físico
Detrás de cada simulación desastrosa hay varios factores ocultos que podrían ganar un Oscar por mejor actuación en un papel secundario:
- Escala real del objeto: Lo que ves no siempre es lo que Maya calcula (sorpresa)
- Centro de masa escondido: Como ese amigo que siempre llega tarde y desordena todo
- Colisionadores tramposos: Mesh vs. Box, la batalla épica de precisión vs rendimiento
En física digital como en la vida real: si algo puede salir mal, saldrá mal... especialmente a las 3 AM antes de la entrega.
Manual de supervivencia para simulaciones
Para evitar que tus objetos desarrollen personalidad propia, sigue estos consejos probados:
- Usa Freeze Transformations como si fuera agua bendita
- Simplifica colisionadores como si estuvieras explicándole física a un niño de 5 años
- Revisa los parámetros globales como si fueran las condiciones de tu hipoteca
Y recuerda: cuando todo falle, siempre puedes decir que es un efecto artístico experimental 🎨. Después de todo, si en las películas los autos explotan con solo mirarlos, ¿por qué tu esfera no puede atravesar un muro de vez en cuando? La física digital es así de caprichosa... y por eso la amamos (y a veces la odiamos un poquito).