Pausa eruptiva en el volcán Kīlauea retrasa fase de fuentes de lava

Pausa eruptiva en el volcán Kīlauea retrasa fase de fuentes de lava
El cráter Halemaʻumaʻu del volcán Kīlauea ha presentado una interrupción significativa en los desbordamientos de lava durante esta mañana, indicando un retraso notable en el inicio de la fase de fuentes de gran altura correspondiente al episodio eruptivo número 36 🌋
Comportamiento eruptivo actual
Según los reportes del Observatorio Vulcanológico de Hawái del USGS, la inflación del cráter se ha estabilizado en los últimos días, permitiendo ampliar el período de pronóstico para la próxima fase eruptiva que se anticipa ocurra antes del martes 11 de noviembre. Esta pausa ofrece a los científicos una ventana de observación crucial para analizar los patrones de actividad.
Características de la actividad previa:- El respiradero norte había generado desbordamientos masivos y fuentes en forma de cúpula con escasa salpicadura
- El magma emitido mostraba un alto grado de desgasificación según las observaciones
- Los patrones de tremor volcánico han transitado hacia una actividad sísmica más constante
El volcán parece estar tomándose su tiempo para decidir cuándo dar su próximo espectáculo pirotécnico natural, demostrando que la naturaleza sigue su propio calendario
Parámetros de monitoreo volcánico
Los instrumentos de medición no han registrado cambios significativos en la deformación del terreno, mientras que las emisiones de dióxido de azufre se mantienen en niveles relativamente bajos, fluctuando entre 1.200 y 1.500 toneladas por día. Estos valores representan una actividad moderada en comparación con episodios anteriores.
Indicadores clave actuales:- Deformación del terreno: sin variaciones importantes
- Tremor volcánico: transición hacia patrones más estables
- Emisiones de SO₂: manteniéndose en niveles bajos
Contexto histórico eruptivo
El episodio anterior identificado como número 35, ocurrido entre el 17 y 18 de octubre, produjo fuentes de lava que alcanzaron alturas extraordinarias de hasta 460 metros y generaron aproximadamente 10 millones de metros cúbicos de material volcánico, cubriendo alrededor de dos tercios del piso del cráter. Este evento previo sirve como un recordatorio contundente del potencial destructivo que puede desencadenar el Kīlauea, incluso cuando las fases actuales aparentan mayor tranquilidad 🌄