Caballo virtual se suma a la plantilla de reparto a domicilio

El caballo digital que trota por tu pantalla sin ensuciar el sofá 🐎
En el mundo de la publicidad, los caballos ya no necesitan establos ni heno, solo un buen software de modelado 3D y un diseñador con paciencia de santo. El último anuncio de Uber Eats presenta un corcel blanco tan realista que casi se le puede oír relinchar... si no fuera porque el sonido viene de los altavoces del móvil.
La magia reside en los detalles: cada músculo digital se mueve con precisión suiza, cada crin ondea como si tuviera vida propia y, lo más importante, nunca deja estiércol en la acera virtual. Un avance civilizatorio sin duda.
"En la publicidad moderna, hasta los animales de fantasía necesitan un buen estilista digital"
Ingredientes para crear un caballo que no existe
Para cocinar esta ilusión visual, los artistas de wwwind Studio mezclaron:
- Pelaje pixelado: 3.427.891 pelos renderizados individualmente (sí, alguien los contó)
- Física de caricatura: viento que despeina justo lo necesario para parecer Instagrameable
- Anatomía imposible: músculos que se estiran más que un yogui en enero
- Accesorios virtuales: desde riendas hasta ese polvillo mágico que brilla sin manchar la pantalla ✨
Por qué este caballo es mejor mascota que un golden retriever
Las ventajas son claras: no muda pelo, no patea tus macetas y cuando se "escapa", solo hay que reiniciar el render. Eso sí, sigue sin entender por qué no puede entrar en los bares, siendo claramente la mejor compañía para una cerveza.
La campaña demuestra que con suficientes píxeles de amor, hasta un herbívoro poligonal puede hacerte antojar de comida rápida. Y lo mejor: cuando acaba el spot, el caballo desaparece sin dejar facturas de veterinario. 🎭
Así que la próxima vez que veas un animal en un anuncio, recuerda: probablemente tenga mejor currículum digital que tú, pero al menos tú no necesitas que te rendericen antes de salir de casa. ¡Qué alivio! 🤣