Es el típico viernes a última hora, no paras de mirar el reloj deseando que den las 3 para largarte de fin de semana y la última media hora moviendo el ratón de un lado a otro haciendo como si haces algo y estando en babia te da por pensar y te das cuenta de que cuando menos te los esperes ya es lunes por la mañana y estas sentado en el mismo sitio y comenzando otra vuelta de ese bucle infinito al que llamas vida.
El caso es que mirando el correo por hacer tiempo hasta las 3, veo que uno de mis contactos del chat de Gmail tiene puesto en su estado la vida es eso que pasa mientras tú haces planes y pienso, ¿debería dejar esto e intentar dedicarme a algo que me motive realmente?
A medios del verano pasado me dió por empezar a aprender algo de diseño 3d, algo que siempre había querido aprender y que por unas cosas u otras al final nunca empecé.
El resumen en este tiempo puede ser.
Dos semanas con Blender, dos meses sin tocarlo, dos semanas con Blender, dos meses sin tocarlo, dos semanas con Blender, dos meses sin tocarlo.
Trabajo como programador y ya me tiro casi 9 horas al día delante de una pantalla, y claro, cuando llego a casa pues no tengo ganas de ponerme. Y aunque algún fin de semana que otro si que me he puesto al final el tiempo libre es para disfrutarlo y no para enclaustrarse.
El caso, es que el trabajo en el que estoy no es que me desagrade, aprendo bastantes cosas cada día, pero es un trabajo en el que no me veo dentro de 10 años. Puede que yo que no estoy trabajando en este mundillo del 3d tenga una imagen idealizada y que luego sea más duro y me lleve más palos de lo que ahora mismo pienso. Pero si me dan a elegir entre un proceso más artístico y creativo como es el diseño 3d y en hacer un programa de facturas para proveedores, etc. Pues me quedo con lo primero.
Aunque en ambos casos al terminar un proyecto haya sido duro es mucho más agradecido ver un muñeco corriendo por un escenario que ver terminado un programa de nóminas que funciona correctamente, por poner un ejemplo.
Desde pequeño siempre me ha gustado mucho dibujar y los ordenadores y esto lo combina perfectamente. Y el caso es que, al final si te pones a pensar, piensas que te has encasillado en un camino y que es muy fácil acostumbrarse a una rutina diaria y oyes continuamente a personas mayores pensar en voz alta tenía que haberme dedicado a esto otro cuando tuve oportunidad.
Y la pregunta es.
¿Dejaríais un trabajo estable, con un buen sueldo y con gente a tu cargo para intentar dedicarte a esto?
¿Os pegaríais un año sabático para aprender más en serio antes de estar metido en alguna trampa (véase hipoteca, coche, etc) que no te lo permita?
¿Os irías de vuestra ciudad (ya que donde vivo no hay apenas nada de esto) para intentar buscar algún trabajo desde esto?
¿O ahora con la crisis es una locura ni siquiera pensar eso con lo difícil que es encontrar trabajo? Y supongo que, mucho más en ese mundillo.
¿Es realmente factible dedicarse a esto en España o tendría que irme fuera?
El caso es que ya veo los 30 palos cerca y, aunque no soy un viejo tampoco soy un chaval, y cuanto más lo pienso menos sé que hacer.
Una vida vivida en base a tus elecciones es una vida de acciones conscientes. Una vida vivida en base a las circunstancias es una vida de creación inconsciente - Neale donald walsch.