El apilado de enfoque mejora la nitidez en fotografía macro

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El apilado de enfoque digital es una técnica que permite obtener imágenes con una nitidez uniforme en toda la escena. Esto resulta especialmente útil cuando se fotografía a distancias muy cortas, como en la fotografía macro, donde la profundidad de campo es extremadamente reducida. El método consiste en capturar una serie de fotografías del mismo sujeto, desplazando el punto de enfoque ligeramente entre cada toma. Luego, se combinan estas imágenes mediante software especializado para fusionar solo las zonas más nítidas de cada una. El resultado final es una fotografía con un detalle excepcional desde el primer plano hasta el fondo, algo difícil de lograr en una sola exposición.

Cómo se ejecuta el proceso de captura

Para aplicar esta técnica, necesitas una cámara y un objetivo que permitan enfocar con precisión, además de un trípode robusto para evitar cualquier movimiento entre tomas. Configuras la cámara en modo manual, fijando la exposición, el balance de blancos y la apertura del diafragma. Comienzas a fotografiar enfocando en la parte más cercana del sujeto. Luego, giras suavemente el anillo de enfoque para mover el plano de nitidez hacia el fondo, capturando una nueva imagen en cada paso. Es crucial que el encuadre no varíe, por lo que se recomienda usar un disparador remoto o el temporizador de la cámara. Cuantas más fotografías tomes, cubriendo toda la zona que quieres que aparezca nítida, más material tendrá el software para procesar.

Software para fusionar las imágenes

Una vez tienes la serie de fotografías, el siguiente paso es fusionarlas. Programas como Adobe Photoshop, Helicon Focus o Zerene Stacker están diseñados para esta tarea. En Photoshop, por ejemplo, importas las imágenes como capas, las alineas automáticamente y luego aplicas la función Apilar imágenes. El algoritmo analiza cada capa, identifica las áreas más enfocadas y genera una composición final combinándolas. Aplicaciones móviles como Photoshop Express o Snapseed también ofrecen funcionalidades básicas para lograrlo, aunque con menos control. El proceso puede demandar recursos del sistema, especialmente con archivos de alta resolución y muchas capas.

Recuerda que esta técnica no crea milagros: si el sujeto se mueve con el viento entre tomas, el software tendrá serias dificultades para alinear las imágenes. La paciencia se convierte en tu principal accesorio fotográfico.