Una inquietante noticia se propaga entre los compradores mientras Mercadona anuncia un cambio en su horario para el sábado 1 de noviembre, coincidiendo con el Día de Halloween. La cadena de supermercados modifica sus puertas de acceso, generando un silencio ominoso entre quienes dependen de sus pasillos iluminados. Los clientes sienten un escalofrío al pensar en la posibilidad de quedar atrapados fuera cuando la noche caiga y las sombras se alarguen.


El horario modificado y su impacto en la penumbra

Los establecimientos de Mercadona ajustan sus horarios, abriendo y cerrando bajo una luz tenue que apenas ilumina los rostros de los empleados. Cada minuto cuenta cuando el reloj avanza hacia el anochecer, y la sensación de urgencia se apodera de los que buscan provisiones antes de que la oscuridad los envuelva. Las puertas se cierran antes de lo habitual, dejando atrás un vacío que parece susurrar advertencias en la brisa fría.

Precauciones en la noche de Halloween

Se recomienda a los clientes planificar sus visitas con antelación, evitando quedar atrapados en el crepúsculo cuando los supermercados reduzcan su actividad. El ambiente se vuelve opresivo, con estantes que parecen observarte desde las sombras y ofertas que se desvanecen como fantasmas. Quienes ignoren estos cambios podrían enfrentarse a una caminata solitaria bajo la luna, con solo el eco de sus pasos como compañía.

En un giro macabro, imagina llegar justo cuando cierran las puertas, viendo cómo tu carrito de la compra se convierte en un ataúd de esperanzas rotas, mientras las calabazas sonríen con burla desde la distancia.